viernes, 1 de agosto de 2008

El alma del can Cerbero

Varias mitologías europeas recogen el mito del perro que guarda la entrada del otro mundo: Garm en la mitología germánica y nórdica, y Cerbero en la griega. El can Cerbero defendía la entrada del infierno helénico, el Hades, y a fe que la primera visión que se les presentaba a los griegos que acababan de cruzar la laguna Estigia, en una triste singladura que para colmo había que pagar al barquero Caronte, debía de ser aterradora: un terrible perro de tres cabezas coronadas por serpientes (que le salían dulcemente de la piel como el pelo al resto de sus congéneres; habría que ver quién era el osado Llongueras que se atrevía a ponerle mechas). Pero el caso es que Cerbero era perro que mostraba diferentes estados de ánimo según fuera la intención del paseante que se acercaba a sus dominios: si el interesado quería entrar al Hades, el animal enseñaba su mejor cara, se mostraba complaciente y movía la cola en señal de alegría; pero, como algún desdichado pretendiera escaparse, Cerbero podía actuar de una forma muy disuasiva. Dicho de otra forma: de las garras del perro mitológico no se hubiera librado ni Michael Scofield, el sesudo protagonista de Prison Break. O mejor aún: escapar del infierno helénico resultaba casi tan difícil como cancelar hoy día un contrato con las principales operadoras de telefonía móvil de nuestro país: Movistar, Vodafone y Orange. Por eso, a pesar de los siglos que han pasado (tantos que lo que era religión hoy no es más que mito), tengo la sensación de que las compañías telefónicas tienen en el fondo el alma del can Cerbero, es decir, actúan de la misma manera, recibiendo a los clientes que quieren entrar con dicharacheros movimientos de cola e impidiendo a toda costa la salida a los que desean cambiar de operador. Para que digan que la mitología es cosa del pasado.

4 comentarios:

Merche Pallarés dijo...

¡Muy buena la comparación, querido Pablo! Me he reido un montón. Lo de las compañías telefónicas es para echarse a llorar... ¡Verdaderos cancerberos! los muy c......s... Besotes, M.

Diego Fernández Magdaleno dijo...

Es aún más difícil lo de las operadoras de telefonía móvil. Una verdadera vergüenza.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Qué cierto es lo de la telefonía móvil. Te atan más que cualquier matrimonio...

Álvaro Fernández Magdaleno dijo...

Es realmente arrepunante.