sábado, 15 de septiembre de 2007

La obra literaria de César Vidal provoca un pánico superior al que genera un piano-bomba

Eso se desprende al menos de los resultados de la última encuesta que ha realizado la Blogse entre sus lectores. Un 60 % de los votantes no compraría la colección de César Vidal ni aunque Richard Clayderman (sin control) les amenazara con un piano repletito de bombas si no accedían a adquirir el fascículo o libro de turno de la colección. Una importante decisión que muchos han tomado sin vacilar porque quizá no soporten el sufrimiento que comportan ciertas sesudas obras literarias. "Cuando la tortura es dolorosísima y además no tiene fin (en referencia a la vasta extensión de la narrativa vidaliana), la decisión más acertada es enfrentarse al temor más común, aunque sea el más inane: la muerte", ha declarado a este cronista uno de los participantes de la encuesta. Ha habido también quien no ha tomado en serio las amenazas porque partían de Richard Clayderman. Su melena rubia y su cara de no haber roto un plato les ha convencido de que no había que tomarse en serio tales advertencias. Yo en su lugar no habría actuado tan a la ligera.

Algunos lectores de la Blogse, aunque en menor número, se enfrentarían al ya citado peligro sin escudo, chaleco antibalas, es decir, a pecho descubierto, con tal de no pasar por el mal trago de comprar Ingeniería extrema en DVD y Osho, biblioteca de la inteligencia emocional, lo cual no me extraña leyendo sólo el apasionante título de esas dos colecciones.

Por el contrario, auguramos un gran éxito a Abanicos de colección, cuyos fascículos llevan un gran número de reposiciones, bien por mérito, bien por demérito. Este extremo no ha podido ser dilucidado por la Blogse.

Visto lo anterior, hemos considerado pertinente ayudar a los creativos de las empresas de coleccionables, cuyas neuronas se están amojamando sin conseguir un producto que enganche a la posible clientela. Voten en la nueva encuesta sobre interesantes colecciones y, si posee alguna idea valiosa, compártala con nosotros y renuncie a sacar con ello provechosas ganancias futuras. Quien explote su idea le estará eternamente agradecido: nunca le pagará nada.

9 comentarios:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

yo me quedé tan impactado por la amenaza de Cleyderman que no me atreví ni a participar en la encuesta. Idea: colección de jarritas con aire de cada pueblo de España. Seguro que cada uno compraba el del suyo, por lo del Conocimiento del medio.

Pablo A. Fernández Magdaleno dijo...

Muy interesante la idea, Pedro. Habrá que estudiarla detenidamente

Diego Fernández Magdaleno dijo...

Tu titular es muy acertado. A mí me pasó. Por eso voté al ganador-perdedor.
Besos,
Diego

Anónimo dijo...

Te has leido alguno de los libros?

nerea dijo...

Lo de la discografía de Cañita Brava sería mucho más interesante si con el primer número regalasen un remix con las mejores canciones de Tamara y Leonardo Dantes...

Saludos!

Pablo A. Fernández Magdaleno dijo...

En tu caso, Diego,es normal que te dé más miedo César Vidal que un piano-bomba. El piano te conoce demasiado como para hacerte una cosa así.

Nerea, es que lo quieres todo. ¿No consideras que Tamara y Leonardo Dantés merecen una colección aparte?

Anónimo dijo...

Anda, pero César Vidal es un escritor??? Joder, yo pensaba que era una editorial por el número de libros que edita. Que tío el Powell de la historia, el resto de historiadores que han sido debían ser torpes, torpes.

Anónimo dijo...

Pues tiene libros excelentes, algunos son demasiado espesos, pero todos son basados en datos rigurosamente exactos. Se puede estar de acuerdo o no en las opiniones personales que de estos datos y hechos deriven, pero lo innegable es que a diferencia de otros no tergiversan en inventan la historia. Además considero que esta persona sería absolutamente incapaz de quemar un libro, tal y como han hecho con él algunos personajes de la progresía ¿por qué será?

Anónimo dijo...

Sin duda, lo que escribe César Vidal, es mucho más interesante que algunos de los comentarios vertidos aquí. Entiendo que hay gente incapacitada para valorar una buena obra literaria..... da pena.... pero es así. Habrá que volver a la enciclopedia Alvarez.
Saludos.